El uso del taxi supone un ahorro para el Ayuntamiento
El taxi adaptado es aquel vehículo convencional en el que se han realizado ciertas modificaciones para poder atender a aquellas personas que tienen una movilidad reducida.
La normativa exigía a este tipo de vehículos que en el año 2017 debía estar adaptada al 5% de la flota de taxis, lo que en nuestra ciudad suponía que 89 vehículos auto-taxis deberían ser accesibles, objetivo que a día de hoy se ha rebasado. Actualmente, hay 102 coches, siendo unas de las primeras ciudades que cumplió el ratio del 5% que mandaba Europa.

El servicio Taxi Accesible o Adaptado se ha ido incrementando gracias a las subvenciones concedidas por el Ayuntamiento de Zaragoza, gracias a la colaboración de Cooperativa de Auto-taxi de Zaragoza y Fundación DFA. Es ya un proyecto consolidado que ha mejorado notablemente la calidad de vida de personas con movilidad reducida.
Este tipo de servicio tiene la misma operativa para cualquier ciudadano, una llamada de teléfono o una reserva de servicio, aunque tiene un incremento de demora mayor que cualquier otro servicio de emisora. La operadora necesita más tiempo para recepcionar el servicio y el taxista emplea mucho más tiempo en recoger, acomodar y dejar al cliente, además de que el volumen de vehículos es menor (año 2022, 102 PMR).
Esta Asociación ha renovado y firmado convenios económicos con el Ayto. para la adquisición de vehículos adaptados, concretamente en el año 2022, la partida era de 110.000 €, este año es de 108.000 €.
A lo largo de estos años se ha continuado implantando, de una forma progresiva, el servicio del Taxi Accesible como un servicio complementario al que prestan los autobuses adaptados para el transporte de personas con movilidad reducida severa (PMRS), como contemplan los sucesivos convenios.
Debido al buen funcionamiento de este servicio, año tras año se incrementa el número de tarjetas que se pueden beneficiar de este servicio, pero, por el contrario, no aumentan en lo deseable el número de licencias adaptadas.
La problemática actual en la que nos encontramos, es un encarecimiento por una falta de disponibilidad de vehículos, la falta componentes, la guerra de Ucrania, la norma UNE 26.494, etc. Aunque, sobre todo y muy importante, la transformación de este tipo de vehículos ha aumentado considerablemente, desde 12.000 € hasta 19.000 € dependiendo del vehículo a transformar.
Si a esto sumamos que el reglamento recoge que este tipo de vehículos únicamente pueden prestar servicio público de taxi 10 años, hace que sea un riesgo financiero mucho más elevado, ya que la partida de amortización, exige un mayor coste mensual, lo que nos lleva a que tenga menos interés este esfuerzo económico para la compra de estos vehículos.
Una solución sería aumentar la subvención de tal manera que al taxista le sea más rentable la inversión. Hay que darse cuenta de que el precio de este tipo de vehículos es notablemente más alto que el de un taxi convencional, al que hay que sumar el precio de la adaptación. Como recoge el artículo del periódico de Aragón, los taxis adaptados realizaron un total de 113.523 servicios con personas de movilidad reducida, con un coste para el Ayto. de 1.048.561 €, es decir, cada viaje le supuso al consistorio 9,23 €, 24 € menos que el bus amarillo.
Con estas cifras queda claro que el Consistorio debe hacer un esfuerzo mayor de cara a mantener e incrementar la flota de taxis adaptados para dar un buen servicio a las personas con capacidades diferentes, para que puedan solicitar un taxi adaptado a la hora y lugar que lo necesite, y así realizar el desplazamiento que precisa.
Fuente: https://bit.ly/3H9pabt